Durante mis dos años conduciendo para Uber y Lyft, me encantó poder conducir cuando y a donde quiero. La flexibilidad es exactamente lo que me atrajo a este tipo de trabajo. Sin embargo, sé que las empresas que trabajan a través de aplicaciones están lejos de ser perfectas. Los trabajadores como yo dependemos de la flexibilidad que ofrece trabajar con estas aplicaciones, pero merecemos más protecciones, y nunca ha habido un mejor momento para hacer ambas cosas: proteger la flexibilidad y expandir los beneficios. En noviembre pasado, los votantes de California dieron un paso importante para hacer precisamente eso. Bajo una nueva medida electoral, los conductores de California finalmente obtendrán la protección y los beneficios que se merecen y, al mismo tiempo, garantizarán su capacidad para trabajar cuando, donde y para quien quieran. Necesitamos tomar los mismos pasos aquí en Massachusetts.